A partir del viernes 20 de enero próximo, los contribuyentes podrán acceder en la página web de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), con su clave fiscal, a la calificación fiscal que el organismo de recaudación les asignó según un sistema que se pondrá en marcha con una resolución a publicar esta semana, y que les permitirá a los ciudadanos acceder a mejores condiciones en los próximos planes de facilidades de pagos y al organismo, fiscalizar a los contribuyentes más riesgosos.

Según informó el fisco nacional, el llamado Siper (Sistema de Perfil de Riesgo) arrojará una calificación compuesta por una tabla de cinco letras: A para "muy buena", B para "buena", C para "regular o nuevas altas", D para "mala" y E para "muy mala".

 

Los principales componentes que se tomarán en cuenta para determinar la calificación serán: 

1. Falta de presentación de declaración jurada y de pago del tributo;

2. Caducidades de planes de facilidades, por incumplimiento;

3. Relación entre débito y crédito fiscal insuficiente;

4. Ajustes de fiscalización significativos respecto de lo declarado;

5. Incumplimentos formales;

6. Riesgo crediticio según la evaluación del Banco Central de la República Argentina;

7. Situación concursal con acreedores, incluida la AFIP;

Y en el futuro agregará más componentes y se asignará diferentes ponderaciones para asignar mejor el riesgo.

En la AFIP señalaron que el uso de la indicador será interno, no se compartirá con otros organismos o el sector privado.

En tanto, la adhesión al blanqueo fiscal o a la moratoria vigente no se considerará para determinar la calificación fiscal.

Según ya relevó el organismo, un 12,8% de los contribuyentes (726 mil) está calificado con un "muy bueno"; 37,2% (2,1 millones), con un "bueno"; 21% (1,2 millones), con un "regular o nuevas altas"; 14,1% (800 mil), como "malo", y 14,8% (840 mil), con un "muy malo".

Se trata de un total de 5,6 contribuyentes que incluye a 5,2 contribuyentes directos y suma a trabajadores que presentan Bienes Personales.

Tanto las personas físicas como las jurídicas no sólo tendrán disponible su calificación fiscal, sino que también podrán conocer cómo se compone y, en caso de estar en desacuerdo, pedir una revisión o solicitar información adicional.

Ante una mejor calificación, los contribuyentes podrán acceder, a partir de abril próximo, cuando termine el sinceramiento fiscal, a planes de facilidades de pagos con mejores condiciones de tasas de interés y cuotas, acceder a un trámite más sencillo para pedir que se exima del pago de anticipos de impuestos y sufrir una menor cantidad de fiscalizaciones.

En tanto, AFIP podrá elegir el universo de contribuyentes a fiscalizar, los más bajos en su escala de riesgo, y destinar su cantidad limitada de recursos para realizar las inspecciones en forma más eficaz.

El sistema rectificará la calificación todos los meses. En tanto, utilizará la información de los últimos uno o dos años, según el impuesto que considere (para los pagos de IVA, los últimos doce meses; para los pagos de Ganancias, los últimos tres períodos).

La AFIP resaltó que el sistema quitará arbitrariedad y sistematizará el tratamiento de los datos fiscales de los contribuyentes.

En tanto, quiere mostrar que cuando se termine el sinceramiento fiscal, será más costoso para los contribuyentes regularizar sus deudas, así cuanto menor sea su calificación en el Siper.

De hecho, $38.000 millones de la deuda consolidada de los contribuyentes (76% del total) proviene de sujetos calificados con baja conducta fiscal.

FUENTE: Infobae.