Como consecuencia de la inflación, el aumento de los salarios y la falta de actualización del mínimo no imponible y de los topes de las deducciones tanto especiales como generales cada vez más trabajadores se encuentran alcanzados por el impuesto a las ganancias, lo cual tiene una incidencia negativa sobre el salario neto de los trabajadores.

Actualmente cera del 25% de los trabajadores, uno de cada 4 trabajadores, se encuentra sujeto a pagar el impuesto a las ganancias. En esta oportunidad vamos a realizar una comparación sobre lo que tributa actualmente un trabajador en tres condiciones, la primera de las cuales seria sin la exención del medio aguinaldo que anunció ayer la presidenta, la segunda tomando en cuenta la exención anunciada por cadena nacional y la tercera situación analizada será como tributaria un trabajador en el caso de que se hubiera actualizado el mínimo no imponible en forma proporcional a la inflación, para lo cual vamos a utilizar dos ejemplos el primero el de un trabajador que gana 7.000 pesos por mes y el segundo el de un trabajador que gana 20.000 pesos netos por mes. El primer caso que vamos a analizar es el de un trabajador soltero que gana 7.000 mensuales,  el mismo con la situación previa al anuncio de ayer de la presidente  de los argentinos, Cristina Fernandez de Kirchner, el mismo debería pagar en concepto de impuesto a las ganancias 1.716 pesos anuales, lo cual representa casi un 25% de unsueldo o el 50% del medio sueldo anual complementario (SAC).

En una segunda situación en la que el trabajador reciba un sueldo mensual de 20.000 pesos, debería pagar un total de 51,191 pesos anual en concepto de impuesto a las ganancias, lo que representa un total de de más de dos sueldos y medio o más de 5 veces el el sueldo anual complementario. Con el anuncio que realizó  la presidente sobre la exención del medio aguinaldo de Diciembre del impuesto a las ganancias por cadena nacional, y teniendo en cuenta los salarios mencionados anteriormente, en el primer caso, con un trabajador que gana 7.000 pesos, se ahorraría 490 pesos anuales, lo que sería un poco más de 40 pesos mensuales. El ahorro que se produce en este caso es del 14% del aguinaldo. Por último, en el caso que se hubiese modificado el mínimo no imponible de ganancias proporcionalmente a la inflación, un trabajador que gana 7.000 pesos de sueldo mensuales no estaría alcanzado por el impuesto, mientras que en el segundo caso dependería de las nuevos límites para cada uno de los escalones, pero el trabajador se ahorraría de pagar entre un 25% y un 30% del impuesto a las ganancias lo que sería entre un 12.000 y 15.000 pesos anuales.

 Con todos los ejemplos mencionados anteriormente queda demostrado que el impuesto a las ganancias produce una incidencia menor en el trabajador pero que la misma es escasa con respecto a lo que el fisco recauda como consecuencia de la no modificación del mínimo no imponible. Otra de las conclusiones que podemos sacar en base al análisis anterior, es que el impuesto a las ganancias dejó de ser un impuesto personal que grava las rentas altas y que tienen en cuenta la situación personal del contribuyente para transformarse en un impuesto real en el que no se tiene en cuenta las condiciones personales del sujeto. Para concluir con el análisis, vamos a decir que el fisco recaudó6 mil millones de pesos adicionales como consecuencia de no actualizar el mínimo no imponible.